Un empate que sabe a poco o nada el obtenido por nuestro equipo preferente el pasado sábado en Altzaga y una dura derrota para
nuestro filial en el partido disputado también en la pista azul de Altzaga.
El Erandiotarrak "A" tuvo todo a su favor para sumar una victoria que refrendase la conseguida frente al líder la semana anterior y la dejó escapar por errores ya demasiado habituales.
7ª Jornada.
Erandiotarrak “A” 3 – 3 Aurrera Beti
Sábado 7 de Noviembre. 16:50 h.
Polideportivo Altzaga. Erandio.
Goleadores: Itai – Erick - Egoitz
Jugaron: Amato – Omar – Julen – Javitxin - Rubén – Mayor – Txutxi - Iker - Erick - Egoitz – Dennis - Itai.
El equipo preferente disponía este sábado de una inmejorable oportunidad para matar dos pájaros de un tiro, por un lado consolidar y hacer buena la victoria obtenida frente al Mamarigako, uno de los candidatos al título, la semana pasada en Astrabudua y por otro, vengar la injusta derrota en los penaltis, frente al Aurrera Beti de Mungia en la final de la Copa de la Liga disputada en Mungia al finalizar la temporada 2014-2015.
Pero se ve que los nuestros no espabilan el sueño vespertino hasta que no se ven por debajo en el marcador. Una vez más y ya van siete, el mismo número que jornadas disputadas, los blanquiazules saltaban a la cancha llevando la batuta y la manija del partido. El rival conocido, su sistema de juego, conocido, como pararles, entrenado, pero de nada sirve si no se hace con la intensidad requerida.
Los primeros minutos no depararon apenas ocasiones en ninguna de las porterías, salvo algún lanzamiento lejano por ambos equipos. Los nuestros comenzaron a perder la tensión por el anodino pasar de los minutos, los de Mungia, se sacudían la presión de la única manera que demostraron conocer durante todo el partido, patadón adelante y tentetieso, cargar a cualquiera de los dos pívots que se batían el cobre frente a nuestra defensa. Pero a pesar de practicar un fútbol sala tan básico y/o rudimentario, supieron sacar amplios réditos.
Primero fue en un balón en largo por el centro, que aprovecharon los foráneos para batir a Omar aprovechando la falta de repliegue de nuestros hombres de presión, cero a uno en el marcador y una clara sensación de fragilidad cuando defendemos en cancha propia. Recibido el primer mazazo, se esperaba una reacción de los nuestros para retomar el partido, pero nada más lejos de la realidad. De nuevo los verdiblancos de Mungia iban a ser los que lograsen un nuevo tanto, esta vez con una salia de presión con balón en largo por banda, la aprovechaba uno de los pívots para llevarlo al centro y tras una disputa aprovechando su corpulencia física, ceder el balón a otro de los hombres altos del equipo visitante para, libre de marca, batir a Omar. Esta visto que la siesta se nos alarga demasiado...
Los nuestros se espolearon a raíz de verse tan abajo en el marcador, y ante el cambio táctico de los foráneos, que pasaron a cerrarse en defensa, pasaron a jugar dos-dos y a subir la velocidad en la circulación de balón para dificultar la defensa rival. Y a los pocos minutos el cambio surtió efecto, Itai entraba por el centro para hacer una pared con Txutxi que le ponía el balón franco para batir al portero visitante sin demasiada oposición. Recorte en el marcador y menos trecho que nadar para llegar a la orilla.
Una vez que parecía que nos habíamos sacado la caraja de encima, a los pocos minutos, llegó el tanto que igualaba el combate. Con los dos equipos en bonus, la sexta falta cayó de nuestro lado y por fin anotamos de doble penalti. Fue Erick el que transformó la pena desde los diez metros para anotar con un disparo raso, potente y colocado a la derecha del guardameta que poco pudo hacer para detener el lanzamiento. Empate a dos y todo de cara para obtener una victoria dado lo ofrecido por ambos equipos en la pista. Solo nuestra mala cabeza y entrar en guerras fuera de lo estrictamente deportivo podía decantar el partido a favor de los verdiblancos. Descanso y al vestuario.
la segunda parte tuvo el mismo guión que el final de la primera. Los de Mungia cerrados y esperando vivir de nuestros errores. Los erandiotarras, jugando dos-dos y apostando por un fútbol sala más vistoso y combinativo. Por justicia, el siguiente gol en subir al luminoso, lo hizo en el casillero blanquiazul, un balón en profundidad a Egoitz, éste lo convertía en un caño y un punterazo que se alojaba en la portería visitante antes de que el portero pudiera ni siquiera hacer intento por detenerlo. Una vez más, el equipo a pesar de comenzar perdiendo, le daba la vuelta al tanteador y se ponía por delante. Ahora era cuestión de aprovechar cualquier ocasión para dar la puntilla y amarrar la victoria.
Puntilla, que no llegó, es más, las guerras individuales, la falta de intensidad y el irse del partido cuando más hace falta la concentración, le pasó factura a los de Erandio en forma de gol y por ende, de igualada. Un balón sin apenas peligro, lo transformó un jugador verdiblanco en un duro y seco disparo que se colaba en nuestra portería ante la pasividad de todos los erandiotarras. Empate y con la cabeza fuera de la cancha, tocaba intentar aprovechar algún balón aislado para obtener en los escasos minutos restantes, una victoria complicada. Los pocos minutos que quedaban no dieron para más, un par de balones para los nuestros y los de Mungia cerrando los espacios, sabedores de que para ellos era un empate más que valioso. Pitido final y tablas en el luminoso, un punto que sabe a derrota.
La conclusión de este partido se saca a través de la conclusión del partido de la jornada anterior, cuando el equipo se limita a lo meramente deportivo es o debería ser uno de los gallos de la categoría, pero si bajamos los brazos y entramos en guerras extradeportivas, cualquiera nos pinta la cara. Toca trabajar mucho y duro para rascar una victoria en la próxima visita del sábado frente al Hegalariak de Sondika en Goronda Beko a las 17:00 h.
Mal sabor de boca el dejado por la derrota del filial contra el colista del grupo.
El partido disputado por nuestro equipo "B" frente al Racing Tolosto, se antojaba sencillo por ser el último clasificado del grupo, pero está claro que para un equipo en formación como nuestro filial, cualquier partido se puede volver una tortura. Y esta es una buena muestra de ellos.
El partido comenzó con un jarro de agua fría en los primeros minutos de la contienda, ya que el equipo durangués anotaba en la primera ocasión en la que se acercaba con peligro a la meta erandiotarra. A pesar de este contratiempo, los locales intentaron dar la vuelta al tanteador con escasa fortuna a la hora de finalizar las pocas ocasiones que generaron.
Parecía que el descanso iba a llegar con un marcador desfavorable a los blanquiazules, hasta que a falta de cinco minutos para la finalización del primer período, una buena jugada a saque de banda entre Yeti, Nacho y Tabi, se convertía en la igualada en el luminoso. Yeti sacaba de banda sin dejar posicionarse a los de Durango y cedía el balón a Nacho para que este dejase de cara a Tabi que batía de un zurdazo al portero visitante. la primera parte no dio más de sí y con el marcador de 1 - 1 se llegó al descanso.
Nuestro filial intentó salir más enchufados a la cancha en los primeros minutos de la segunda parte y obtuvieron su premio en forma de pena máxima. Moro se zafó de dos contrarios entrando en velocidad desde el centro del campo y fue objeto de una falta nada más adentrarse en el área. El árbitro no dudó y señaló la pena máxima que Yeti transformó para poner en franquicia a los blanquiazules.
Pero, poco duró la alegría en la parroquia blanquiazul, ya que los durangueses se repusieron del gol a los pocos minutos igualando la contienda. En ese momento el partido pasó a convertirse en un combate trabado por las innumerables faltas e interrupciones provocadas por los visitantes que veían en el empate un sabroso premio.
Pero trabar el partido tiene sus riesgos y el rival cayó en la sexta falta para ceder un doble penalti que sirvió para poner en ventaja a los nuestros con un gol obtenido por Yeti desde los diez metros. Vuelta a llevar la manija del partido e intentar amarrar el marcador.
El equipo durangués subió entonces las líneas de presión provocando algunas imprecisiones en la salida de los nuestros que en un error de bulto cedieron el esférico a un rival para que batiese a Moi sin oposición y poniendo el balón en la escuadra e igualando el tanteador.
Cuando todavía los nuestrs estaban intentando reponerse al empate, llegó un nuevo tanto del equipo de Durango restando cinco minutos para finalizar el partido. Los nuestros se lanzaron a poner el portero jugador en pista sin conseguir fruto alguno y de hecho el Racing Tolosto obtuvo anotar el quinto gol en su casillero aprovechando una pérdida de balón y marcando a puerta vacía.
3 - 5 marcador final que supone un paso atrás en las aspiraciones de nuestro filial de cara a salir de los puestos bajos de la clasificación. Esta semana desplazamiento a Mundaka para disputar un nuevo encuentro frente a Mundakako Katillotxu el sábado 14 a las 19:00 en el Polideportivo Municipal de Mundaka.
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